El trabajo pictórico de Juan Uslé (Santander, 1954) se determina por un cromatismo muy intenso, y una dualidad latente en la que se entremezclan la geometría y lo orgánico, el dinamismo y la quietud, la austeridad y el abigarramiento. Protagoniza, junto con otros artistas de finales de la década de los ochenta, la crítica internacional de momento y su obra, se reconoce como una de la más alusivas de esa generación. Está íntimamente ligado a la abstracción.